Fuego, arde, late al viento
Siento al verlo me devora
Cuál bravo mar que con sus olas
derrota al náufrago sediento
Y hallo dentro sentimiento
de verte, yo ciego, a todas horas
Cobrizo fulgor que enamora
a este corazón sincero
Caminando el momento espero
de que se vayan las tardes nubosas
y tu pelo de olor de rosas
esté recostado en mi pecho
Y este alma maltrecho,
herido en lo profundo por tu boca,
al ver tu rostro se alborota
y se declara fiel de tu credo
Clama al tiempo tu llegada
Rien mis adentros recordando tu sonrisa
Imagino que mi aliento al pronunciarte se hace brisa
soñando despierto que tu mirada es morada